El Mayor Fernández no dejaba de inquirir la vista de Geróm, incluso cuando éste terminó de relatar su historia, como si en los ojos del superviviente Fernández buscara la verdad de lo que esa temblorosa boca juraba. Al notar por fin que el capellán castrense se sentía incómodo por su incesante mirada, Fernández se retiró de la enfermería sin decir ni una palabra. Nadie lo vio por varias horas y no pudieron hallarlo ni en sus aposentos. Neriela y el resto de la tripulación comenzaban a preocuparse en serio cuando Fernández apareció como si nada en la entrada del puente principal, flanqueado por Paravaldo y Alamines. Neriela rompió el silencio y comenzaba a reprochar su ausencia, mas el Mayor de inmediato la mandó callar y pidió a todos en la sala su atención.
Rafael Alejandro González Alva nació en la Ciudad de México en 1993. Es Lic. en Diseño por la Universidad Autónoma Metropolitana y Lic. en Lengua y Literaturas Hispánicas por la Universidad Nacional Autónoma de México. Ha trabajado en empresas y proyectos relacionados con el diseño gráfico y la literatura, de entre los que destaca haber sido parte del grupo de trabajo del PAPIME “Leliteane. Lengua, literatura y teatro en la Nueva España”, dedicado a la difusión y estudio de las letras novohispanas. Actualmente cursa el XVI Diplomado de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, que imparte el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura desde 2010. En 2020 comenzó a publicar verso y prosa breves en medios digitales.
