Por Antonio Rangel
Para Uma
Después de 1995 nacieron personas a las que les debe de costar imaginarse un mundo sin Internet y sin celulares. De la caída de las Torres Gemelas de Nueva York, si acaso, sólo habrán visto memes. En este momento están en la universidad, en la preparatoria, en la secundaria, en su primer empleo o, yo qué sé, aguardando vicios en una esquina. iuk.
Los textos que se han escrito sobre esta nueva generación concluyen en una obviedad en la que yo no quiero caer: no podemos todavía saber realmente qué carajos harán con el mundo. Como yo conozco un poco de la teoría generacional de Ortega y Gasset y de Julián Marías, no me detendré en lo que para mí es obvio; a mí no me importa qué clase de consumidores habrán de ser los actuales adolescentes, lo cual al parecer es lo único que motiva a los centros de investigación como The Center for Generational Kinetics. Mi intención es otra, reconocer su presencia y ciertas señas de identidad.
De momento lo que me parece más significativo es que la Gen Z, como la llaman, va a tener muchas y variadas experiencias sexuales, más que sus padres de la generación X o que sus abuelos jipis, que ya es decir mucho. Especialmente en lo que respecta a la bisexualidad. 😮
No estoy tratando de espantar burgueses ni nada, pero de algún modo sí sugiero que las preferencias sexuales poseen un componente voluntario y cultural, por lo cual hay diferencias entre una generación y otra. Sería disparatado creer que la Generación Z nace con mayor predisposición genética a la homosexualidad, habría que reconocer, por el contrario, que los incentivos sociales a tener esa clase de prácticas son mayores actualmente. En términos simples: es una moda, y me atrevería a apostar que en mayor proporción entre mujeres.
Para muestra un botón de Gran Bretaña: en 1991, jóvenes de 18 a 24 años, de la Generación X, en un 91% declararon ser totalmente heterosexuales. En cambio en 2015, en el mismo rango de edad, sólo el 46% se declaró heterosexual. Así que aquí va mi primer tip gratuito para los empresarios que financian el robo de datos, los análisis de big data y a los institutos de investigaciones generacionales: inviertan en porno gay. 😉
Si tratara de explorar las razones para el aumento de las prácticas homosexuales, diría que se debe a la excesiva confianza en la experimentación, en la idea de que vivir de todo es algo positivo. Si empezáramos a ver que la premisa de que todo es válido indica una gran pereza mental, seguramente no confiaríamos en la conveniencia de experimentar lo que sea. Wtf.
Según ciertos artículos, una constante que identifica a la gente joven es la sensibilidad o, mejor dicho, la desproporcionada tendencia a sentirse ofendida, por eso también algunos hablan de “Snowflake Generation”, en español yo diría “chilletas”. ¿Acaso resistirían unas semanas en el Club de la Pelea? Pero, la verdad, yo no culpo a los más jóvenes, ni siquiera a los más quejicas de mi propia generación, sino a la Generación X de este establecimiento absurdo de corrección política a favor de las minorías.
Si alguien de la Generación Z se siente ofendido por un negro que promociona un panecillo cubierto de chocolate, primero hay que reclamarle a sus padres por acostumbrarlo a pensar pendejadas. Quienes se sientan ofendidos, que se jodan, que se calmen y que regresen a la mesa hasta que se hayan contentado.
El gobierno no se estableció para proteger sensibilidades, se estableció para extorsionarnos a través de impuestos como una mafia cuya pretensión es monopolizar la violencia, entonces pedir más leyes para sentir menos miedo o más seguridad o más bonito, no es más que pedir opresión enmascarada. ¿Quién enseña a los más jóvenes que son ellos los que tienen que defenderse a sí mismos? En lugar de eso, se les manda con la maestra del kínder el resto de su vida a contarle sus problemas. Nmm prrs
Por supuesto no digo que sean así mis snowflakes, sino que se les está intentando moldear de esa manera: en la sobreprotección. ¿Y por quién va a votar una generación sobreprotegida? Por la postura más conservadora, así lo predigo. En México, quienes estrenarán su voto en 2018, lo depositarán seguramente por el mismo candidato que alguno de sus padres. ¿Dónde quedó la rebeldía? xD
¿Equis-dé? Lo más sensato en nuestro país sería llamarla Generación Equisdé, haciendo referencia a esta carita sonriente: xD, que no sospecha los peligros de la amabilidad, que son en primera instancia el peligro de evitar los conflictos y con ello preservarlos, y en segunda instancia el peligro de nunca rebelarse y de esa forma permitir que las personalidades tiránicas dominen.
La Generación Equisdé cuenta con el superpoder de resistir mucho tiempo viendo a gente superficial y egotista, a quienes conduce a una breve fama youtubera. Quizá esto se relacione con otro superpoder: tirarse al drama y subirse al tren del mame al mismo tiempo, liquidez sentimental, bipolaridad inmediata, tragicomedia a flor de piel. :’v
Cuando no tienen nada que decir dicen: x2.
A nu ma sí cierto. Su capacidad de asombro pareciera nutrirse del trastorno de déficit de atención, esa invención de las farmacéuticas con la que nuestra sociedad tanto se ha encariñado. tsss
Son tan poco proclives a ejercitar la voluntad, que su paciencia no se dilata más de quince segundos. Aiuda.
Han crecido en una época de nuevo y absurdo puritanismo en la que se cree que existe el derecho a sentirse ofendido. Oie ke sad. Tendré que borrar lo que escribo seguramente: unas veces no sé qué decirles ni qué tan serios son sus sentimientos, del mame al suicidio no hay más que un paso. P-ro khe raios. El mundo virtual en el que se desenvuelven, con sus filtros zoofílicos de snapchat, sus historias efímeras del Instagram y sus memes del viejo Fb, en vez de que les haga pensar que todo el mundo miente y que sus contactos son histriones en un enorme teatro cibernético, sucede que la virtualidad determina sus niveles de autoestima. Un like y me mato.
En fin, ¿me atreveré a lanzar algún consejo no solicitado? Simón, jalo, me rifo, haré lo mío:
Queridos centenials o zetas o equisdé, os aconsejo que lean textos escritos por mentes brillantes, por ejemplo, Jordan Peterson, suscríbanse a su canal y salgan del caos, decoren el lugar en el que duermen y duerman ocho horas seguidas para que sigan creciendo gorditos y bonitos, uwu.
Pd. Ya no me manden nudes. lnl
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