CAÍDA

por Manny Martínez

¡Te pienso! ¿Te extraño?

Siento tu aliento cerca ─recuerdo de una mala racha─.

¿Te vuelvo a extrañar?

Una voz en mi memoria.

El sol hace mofa de mi solitaria sombra ─sólo me acompaño─.

La luna me observa y tranquila vela mi desvelo.

El cansancio domina mi fuerza y caigo al vacío.

¡Estás ahí!,

esperando esa inevitable caída.

Me arropas con tu silencio y me arrullo con el eco de lejanas voces.

Un extraño frío avanza por mi espalda.

Te pregunto: ¿Me amas?

No respondes.

Besas mi frente y se aleja tu mirada.

Sonríes y mascullas ─estoy cerca─.

¡Siempre cerca!

Aún cuando no me buscas, cuando me reclamas, cuando te tortura la extinción de vidas cercanas.

Cada momento de tu vida ─es para mí─, el triunfo de tu pequeña batalla.

Nunca dudo.

Sé que algún día la eternidad te dejará conmigo.

Ahora.

¡Levántate y conquista! lo que buscas detrás de las murallas.

IMAGEN AL EXTERIOR

Sueño de amor I >> Óleo >> Alberto Pancorbo, España.

Manny Martínez-Torres. Año 1977, día 6, con el clima divertido y los aires que en febrero visitan la ciudad de León, Guanajuato en el centro de México, llegó a ocupar el cuarto sitio como hija de una familia de ocho hermanos. Ascendencia de arraigo desde 1700, Padres tejidos a la antigua con espíritu de progreso, la guiaron por un camino independiente.

Desde muy pequeña su gusto por socializar, la llevó a ser una niña versátil, noble y adaptable. Comenzó a plasmar sus sentimientos en papel desde su adolescencia, sin embargo, guardaba para sí un torrente de sensibilidad.

Impulsada por diferentes maestros de vida, fue tomando valor para mostrar al mundo sus escritos. Finalmente, se permitió compartirlos, gracias a un tutor literario que se convirtió en inspiración y empuje para dar a conocer hoy día, la tinta de su corazón.

TE PUEDE INTERESAR

Dejar un comentario