Por María Pérez
El título de una novela es como el aroma a feromonas que provoca la atracción de los sexos, es el rostro que te hace voltear la mirada, es la ansiedad que te mantiene despierta en las madrugadas, El mundo es ancho y ajeno es el título del cual me enamoré, y me lo llevé a mi Cama de libros.Es una novela sobre la relación con la tierra, con sus ciclos vitales, primavera, verano, otoño, invierno, el hombre agricultor e integrante de un pueblo originario.
Los llamados indígenas son retratados en la novela indigenista con la terrible división que provoca la cercana lejanía en la que vivieron los colonizadores con los hombres a quienes sometieron. La cruda realidad, este estar cerca de alguien tan sólo para lastimarlo, sin pensar en la opción de conocerlo, genera melancolía; la Cama de libros se puso helada, cayó la noche y arropó al sueño para que se alejara a prisa de la realidad.
El mundo es ancho y ajeno se publicó en 1941, el escritor Ciro Alegría presenta en esta obra clásica de la literatura peruana un drama generalizado en todos los grupos indígenas que vivieron el despojo de sus tierras; su narrativa crea una cercanía con la crudeza de las relaciones entre colonizadores y colonizados. Es frecuente el uso de elementos históricos para su construcción, pero también está presente el aspecto ficcional, el escritor se empeña en la inclusión de aspectos míticos propios de toda comunidad indígena, describe detalles sobre la relación del hombre con la tierra, su cercanía con la naturaleza, y a la vez su lejanía del mundo que sólo adora el dinero y ejerce el atropello, la prepotencia y la humillación.
En la Cama de libros son claras las relaciones simbólicas de los personajes, el hombre viejo unido a las costumbres, el joven mestizo que abre paso al progreso y, por desgracia, en toda la obra la farsa de sus derechos. Ya sea de forma mítica o económica, la novela te muestra de cerca el destino de los indígenas y la lejanía de los hombres ricos con esa misma tierra que saquean.
La historia ofendió mi Cama de libros, la novela se internó en las entrañas del saqueo y la sobreexplotación, mostró los territorios de los pueblos originarios, yo por instinto llevé el libro bajo las cobijas, lo arropé en mi lecho, en el grato espacio para descansar. Es buena idea que lleves esta novela a tu cama de libros, la obra presenta el desasosiego que causa alejarse de la tierra donde se aprendió sobre los dioses, las leyendas, los rituales. En la cadena montañosa de Perú se ubica esa lucha y es mucho más que historia sobre una etnia.
En la Cama de libros vienen los sueños, las reflexiones y las críticas al Estado represor, pues aunque terminó mucho tiempo atrás la esclavitud, no se eliminó la discriminación y el maltrato constante en contra de los grupos originarios, la agresión provocó un cambio de valores y luego el rompimiento de los hombres con la tierra. Pasé varias noches sin entenderlo, sufrí con ellos la perdida y me abatí.
Al principio fue el nombre de la obra lo que me atrajo, por ello comencé la lectura, pero su tesis melancólica sobre los grupos étnicos congeló mi recinto, así que me apuré y cuando terminé de leerla mi Cama de libros se volvió un mundo más tolerante, los sueños fueron sobre el valor de la tierra. No sé con certeza si la obra sea una visión del universo indígena o tan sólo el drama de serlo, el hecho es que la justificación del despojo fue el progreso, con él vendrían nuevas opciones de vida, de otras regiones, de lejanos mundos, separados de la relación profunda con la tierra que nos alimenta.
En verdad, si puedes lleva esta novela a tu cama de libros, sufre su condición, sueña el mundo desde la visión de los indígenas, ya que, es tan sorprendente como su nombre: El mundo es ancho y ajeno, formidable, con fuertes feromonas, como te decía sobre la atracción hacia los títulos.
3 comentarios
Qué manera tan exquisita tienes Maria de hablar de este libro y el tema que lo atañe!. No alcanza mi imaginación a resoplar ni un ápice de todos los sentimientos,sensaciones y emociones que su autor pudiera mostrar sobre la triste realidad que viven nuestros hermanos indigenas.Gracias por compartir con nnosotros tu punto de vista. Eres una mujer extraordinaria.
El mundo es ancho y ajeno, claro!! Pareciera solo el titulo del libro pero es más presente y frecuente de lo que creemos, aveces lamentable y otras veces muy enriquecedor lo que sucede en el Universo indígena. Gracias María, me encanta la idea de arropar los libros bajo la cama. Saludos!
Dolorosa realidad la de nuestros pueblos indígenas en toda Mesoamérica…
Seguimos en resistencia. Hasta la victoria siempre!!!