LA DIOSA BLANCA, DE ROBERT GRAVES

por Guillermo Santana

Por Guillermo Hernández Santana

In dedication

All saints revile her and all sober men

Ruled by the God Apollo’s golden mean

In scorn of which I sailed to find her

In distant regions likeliest lo hold her

Whom I desired above all things to know,

Sister of the mirage and echo.

.

It was a virtue not to stay,

to go my headstrong and heroic way

seeking her out at the volcano’s head,

among pack ice, or where the track had faded

beyond the cavern of the leven sleepers:

whose broad hígh brow was white as any leper’s,

whose eyes were blue, with rowan-berry lips,

with hair curled honey-coloured to white hips.

.

Green sap of Spring in the young wood a-stir

will celebrate the mountain mother,

and every song-bird shout awhile for her;

but i am gifted, even in november,

rawest of seasons, with so huge a sense

of her nakedly worn magnificente

i forget cruelty and past betrayal,

careless of where the next bright bolt may fall.

En dedicatoria

Todos los santos la infamian y todos los hombres sabios

regidos por la regla de oro del dios apolo

en desprecio desde que navegué para encontrarla

en lejanas regiones donde era más probable hallarla

a quien deseé conocer sobre todas las cosas,

la hermana del espejismo y del eco.

.

Fue una virtud no detenerse,

seguir mi necio y heroico camino

buscándola en la cabeza del volcán

entre los témpanos de hielo, o donde se desvaneciera la huella

más allá de la caverna de los siete durmientes:

cuya frente ancha era blanca como la de cualquier leproso

cuyos ojos eran azules, con los labios de bayas,

con el pelo rizado coloreado de miel hasta las caderas blancas.

.

La savia verde de la primavera se agita en la madera joven

celebrará a la montaña madre,

y cada canto de ave trina un momento para ella;

pero yo estoy dotado, incluso en noviembre,

la más cruda de las estaciones, con un enorme sentido

de su desnudez gastada y magnificencia

que olvido la crueldad y la traición pasada

indiferente a donde pueda caer el próximo rayo.

konstantin-makovsky-1886-la-musa-de-la-poesia-oleo-sobre-lienzo

La musa de la poesia » Konstantin Makovsky

 

El poema no es sino la dedicación del libro The White Goddess. Para decirlo burdamente está dedicada a la musa de los poetas. La versión que llegó a mis manos después de una larga búsqueda está en formato digital en español, aunque después de varios años logré encontrar una versión impresa. El hecho es que gracias a los desafortunados hijos de Graves, la obra fue publicada en inglés y se dejó casi en el olvido la versión hispana. Las pocas ediciones que se encuentran en las librerías son raras, de hecho, he conocido personas que no han tenido éxito en su encuentro con La Diosa Blanca.

Hace una década, algunos apasionados a la mitología que sabían que el libro no se iba a reimprimir en español, hicieron circular una copia en Internet a cambio de otros libros igualmente valiosos. El poema, que es la dedicatoria del libro, aparece al principio. Aunque la mayoría de gente que ha trabajado temas mitológicos ha dicho abiertamente que el poema en realidad, es la dedicatoria.

El poema está escrito en endecasílabos y con rima AABB. Se presenta a manera de las antiguas novelas que incluían al principio del libro un soneto clásico en la primera página. Ahora eso no se usa y dudo mucho que se llegue a utilizar otra vez, pues la tendencia poética se orilla actualmente hacia el versículo en la poesía occidental.

Leer poesía implica siempre un acto heroico no porque se trate de un género épico sino porque en la actualidad ya no se lee tanta poesía; al mismo tiempo los poetas no se preocupan por enaltecer el mundo, ahora, la poesía ronda en torno a la reflexión, a las emociones internas y es reflejo de la crueldad citadina. Los poetas no exaltan a la diosa blanca, sino a la oscuridad, hablan de la noche, ya no de los campos de trigo ni de la belleza campestre. En la actualidad la poesía en América, con la influencia de los poetas del siglo pasado [que se atrevían a decir cualquier cosa], ronda en feísmo y en yoísmo. El poema “La diosa blanca” no lo hace, más bien busca, la forma original de la poesía en el pasado. Parece que los patrones se repiten. El poema de Graves no va solo sino con una gran carga de símbolos que por su parte José Emilio Pacheco interpretó desde otra visión en su poema “La Diosa Blanca”. Mientras el poema de Graves “In dedication” es una reverencia a la musa, José Emilio Pacheco la interpreta con otros rasgos, como una especie de bruja admirada sólo por él y rechazada por los bardos.

Si bien, Graves, hace uso de una interesante forma de usar el lenguaje poético, también encontramos en Pacheco formas propias de la poesía. No hablo de la función poética del lenguaje o de las metáforas; sino de la forma en que se aborda éste a partir de la imagen y el referente que toma determinada palabra en la poesía.

Parecen poemas muy distintos en la forma, el estilo, el lenguaje y la manera en la que lo articulan, pero en realidad hay similitudes entre los dos poemas; el de Graves es anterior al de Pacheco. En seguida la interpretación de “La Diosa Blanca” de José Emilio Pacheco:

La diosa blanca

Porque sabe cuánto la quiero y cómo hablo de ella en su ausencia,

la nieve vino a despedirme.

Pintó de Brueghel los árboles.

Hizo un dibujo de Hokusai el campo sombrío.

.

Imposible dar gusto a todos.

La nieve que para mí es la diosa, la novia,

astarté, Diana, la eterna muchacha,

para otros es la enemiga, la bruja, la condenable a la hoguera.

Estorba sus labores y sus ganancias.

La odian por verla tanto y haber crecido con ella.

La relacionan con el sudario y la muerte.

.

A mis ojos en cambio es la joven vida, la Diosa Blanca

que abre los brazos y nos envuelve por un segundo y se marcha.

Le digo adiós, hasta luego, espero volver a verte algún día.

Adiós, espuma del aire, isla que dura un instante.

Para Graves, hay una búsqueda de la diosa, de la musa; en Pacheco hay una adecuación del sentido o una interpretación. Mientras que Graves piensa en la musa, en la mujer a la que se le debe adorar y rendir culto, en José Emilio Pacheco no hay una idealización de la musa mujer sino de la musa naturaleza; mientras que Robert Graves habla de una musa femenina y del mito, pero Pacheco usa las cualidades de esa musa para hablar de un elemento natural. De esta forma no podríamos decir que el centro de un poema es siempre la mujer.

El libro The White Goddess no abarca completamente el misterio de la musa de los poetas, del mito alfabético y del lenguaje poético, sino que hace la búsqueda de un ideal poético. La diosa blanca apunta a la poesía como un lenguaje mágico que estaba vinculado con las ceremonias de la Diosa Luna y de acuerdo a Graves, ese lenguaje fue corrompido por las guerras y los invasores, una perspectiva con rasgos puristas.

En cada uno de los ensayos que ofrece su libro, se nota la crítica a un dios masculino, explica que los grandes problemas de la sociedad actual van de acuerdo a la perspectiva de tener un Dios en lugar de una Diosa. En los relatos de Graves, hay un regreso o una búsqueda de la musa, punto de fuga de los poetas de todo tiempo.

Cada cultura buscó inspiración en un determinado elemento, los japoneses en el instante, motivado por la contemplación; la civilización griega, que es tan fuertemente criticada por Graves, buscó la inspiración en las diosas bajo la influencia de un dios terriblemente lógico, el dios Apolo; el panteón mesoamericano tiene una cantidad impresionante de deidades, cada una orientada a diferentes favores. Especialmente, Xochipilli se relacionó a las bellas artes por medio de las flores. De ahí, elementos en la naturaleza como el quetzal o el canto aparecen en la poesía náhuatl. Otros ejemplos de inspiración aparecen en la poesía judía, que se basa en sus propios dioses y demonios. Estos son mostrados en relación a los hombres, al amor y a órdenes supremos.

Se trata pues, de la primera gramática histórica del mito poético, de ahí, la importancia del libro, también se trata de una obra eminentemente metafórica, la obra de Graves no sólo hace uso de una eminente estructura basada en la búsqueda de diferentes mitos, sino que hace uso del lenguaje poético para encontrarlos, es decir, que el lenguaje poético lo vuelve un ente con identidad y necesidades propias. El libro refleja la historia que Graves imagina de lo que son las obras poéticas primitivas. La Diosa Blanca es una combinación entre el ensayo del mito y un compendio poético. Uno de los principales aportes es que las primeras civilizaciones notaron que todo venía del cuerpo femenino, identificaban pues, a la mujer como la dadora de vida, como la diosa, así, la labor del hombre estaba en torno a ella, la diosa. El autor ve a la mujer como centro y se rinde ante los tres principales aspectos de ella: la doncella, la anciana y la matrona.

Graves es exhaustivo en la forma de buscar a la musa, hace una excesiva comparación de religiones para encontrarla, por lo tanto este trabajo es crucial para entender los trabajos posteriores, tanto del mismo autor como de la poética en la actualidad. Además se trata de una búsqueda personal en la que la poesía queda definida por medio de la musa y no por medio de la investigación o el análisis histórico.

¿Cuál es la utilidad o la función de la poesía en la actualidad? es una pregunta no menos acerba porque la hagan con insolencia tantos estúpidos o la respondan con apologías tantos tontos. La función de la poesía es la invocación religiosa de la Musa; su utilidad es la mezcla de exaltación y de horror que su presencia suscita.

Si bien, la Diosa Blanca no es lo más representativo en la obra de Graves, si es algo bastante simbólico. Ella se ha identificado con todas las diosas de la Luna, entonces, la obra en cuestión es un intento de analizar el concepto de musa y de diosa en varias culturas.

El discurso poético está hecho de temas entrelazados:

Todos los santos la infamian y todos los hombres sabios

regidos por la regla de oro del Dios Apolo

en desprecio desde que navegué para encontrarla

en lejanas regiones donde era más probable hallarla

a quien deseé conocer sobre todas las cosas,

la hermana del espejismo y del eco.

La diosa blanca es una mujer a quien se le exalta la belleza desde los primeros versos, se implica la búsqueda de esa mujer de la que habla en todo el libro, pero, esa mujer a quien la lógica aristotélica y los dioses han denigrado, él la busca y la desea “sobre todas las cosas” aunque la búsqueda sea un mito. En él no se encuentran barreras sino relaciones, así, hay muchas diferencias entre el discurso original, escrito en inglés y el traducido al español, pero las semejanzas son más.

¿Cómo podemos decir que “La hermana del espejismo y del eco” es la misma imagen que “la nieve”, la condenada a la hoguera de José́ Emilio Pacheco? En realidad, más que hacer una analogía, está representando algo con la imagen, los elementos que denota la nieve. Hace una relación entre lo que existe y lo que nombra, puesto que hay una especie de metalenguaje integrado en el arte que pareciera que éste mismo debe definirse (Baudrillard, 1994).

La obra es un tratado poético que no habla literalmente de ella misma, sino que hace uso del metalenguaje poético para definirse, no es la intención de Graves porque desde el principio dice que hay gente que ha tratado de definir la poesía con tantas apologías que caen en una especie de indefinición, es decir, recurrir a la poesía para definir a la poesía, entonces se trata de indeterminación, es decir, se crean nuevas imágenes, similes y metáforas de las metáforas de la poesía.

OBRAS CONSULTADAS

Perceval Graves, Richard. (1987). Robert Graves and The White Goddess.

Baudrillar, Jean. (1994). La simulación del arte, conferencia dictada en Caracas.

TE PUEDE INTERESAR

Dejar un comentario