Me entregué a las páginas sin saber que te estaba llamando.
Porque eso es lo que hago, obedezco a las letras que exigen ser escritas, creo universos de maravilla y dejo que me posean las musas. Comencé a escribir una historia sin saber que sería la nuestra. ¿Cómo podría haber adivinado que esta vez no se trataba de las diosas de las artes, sino de la vida intentando hacer que la escuchara?
Tú, mi profecía de fugacidad.
Apareciste entre sueños, te contemplé en mi mente, vi tu llegada incluso antes de conocerte. Te presentaste entre oniros, te avisté en mi imaginación, vi tu partida antes de siquiera saber tu nombre. Cuando por fin entraste a mi vida, estaba demasiado envuelta en tu sonrisa como para darme cuenta del parecido entre tú y mi ensoñación; estaba tan anhelante en carne y corazón por ti que no me percaté que pertenecías a un mundo quimérico.
Tú, la promesa de lo que pudo ser y no fue.
Si la lírica te trajo a mí, usaré los versos para dejarte ir. Me despido. Te suelto porque debo hacerlo pues, aunque tu mirada me revela que vas a extrañarme y tus brazos alrededor de mi cuerpo gritan que no quieres liberarme, terminarás olvidándome. Estando en el paraíso, ¿por qué habrías de voltear hacia atrás donde yo me quedo?
Como un obituario del amor que jamás nació, estaba predicho que tu destino no estaba a mi lado. Extrañaré los besos que nunca sucedieron, las pláticas que quedaron pendientes y las noches juntos que no compartimos. Pero tu recuerdo se irá desvaneciendo.
Tú, mensajero del azar. Cumpliste tu propósito, me abriste los ojos.
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La muchacha sentimental >> Ubaldo Oppi., Italia, 1889-1942.
La Rosa de Plata, Ana Karla Carrera Herrasti nació el 19 de diciembre de 1994 en el Estado de México. Con apenas seis años, encontró en la escritura su llamado y la mejor forma de liberar sentimientos atrapados. Con el tiempo, descubrió que le apasionaban los idiomas, así que se dedicó a perfeccionar su lengua materna y a aprender otras lenguas. Actualmente, es licenciada en idiomas, tiene diez años de experiencia como profesora de inglés y ha tomado distintos cursos de traducción y corrección de textos. Debido a su amor por la literatura e influencia de Khalil Gibran, Edgar Allan Poe, entre otros autores, ha escrito poemas, historias de terror, fantasía y relatos eróticos bajo el pseudónimo de La Rosa de Plata, muchos de los cuales fueron seleccionados en concursos para ser publicados. Hoy en día, busca entrar al mundo editorial y se prepara para publicar su primer libro independiente.